martes, 12 de mayo de 2015

NO VENDAS TU PRIMOGENITURA!!!!




MUCHOS ESTAN VENDIENDO SU PRIMOGENITURA, COMO ESAÙ POR UN PLATO DE LENTEJAS!! Asi es: hace unos dias el Espiritu Santo me ministraba este versiculo una y otravez, me lo repetia. Cuando le pregunte sobre el porque esta fue la respuesta: Que muchos estan vendiendo lo mas sagrado que Dios les dio y deposito en ellos, por un momento de placer, por un momento de sastifaccion y por un momento de mala decision. Muchos al igual que Esaù venden su futuro espiritual por una satisfacion momentánea, mucha gente prefiere la satisfacción de la carne, que seguir lo que Cristo les ofrece. Si asi es valoran más el placer temporal del pecado aquí y ahora que la salvacion que les esperaria y la vida eterna en el cielo. Aman mas las tinieblas que la luz, aman mas la inmundicia que la santidad, aman mas la mentira que la verdad y aman mas los deleites del mundo que la obediencia a la palabra de Dios. Asi como Esaù nosotros los hijos de Dios somos llamados primogénitos, porque al nacer de nuevo hemos recibido junto con el gran nacimiento en Cristo, la herencia y con ella somos participes de las promesas y paquete de bendiciones espirituales. Pero muchos hemos menospreciado esa primogenitura, cambiandola por cualquier cosa que vale lo mismo que un plato de lentejas. Como por ejemplos: Por adulterio, fornicacion, inmoralidades sexuales, robos, mentiras, falsa doctrina, libertinaje, ganancias desonestas, trabajos, personas o parejas que nos separa o esta fuera de la voluntad de Dios, malas desiciones, ect. Esaú, cambió un bien espiritual como eran los derechos de la primogenitura, por un momento de placer, por un plato de lentejas, que por mas cocinadas que estubieran, por mas ricas que supieran y por mas que fuera el hambre, no dejaban de ser solo lentejas y su valor era solo eso. Asi como Esaù ofendio a Dios, asi nosotros lo ofendemos, cuando valoramos más la satisfacción del momento que no ofrece satanas, la carne y el mundo que la ofensa que hacemos a Dios, cuando profanamos su templo sagrado. (1 Corintios 3-16-17) No sabeis que sois templo de Dios y que el espiritu de Dios mora en vosotros? Si alguno destruyera el templo de Dios, Dios lo destruira a el, porque el templo de Dios, el cual vosotros sois santo es. Esaù si leemos la historia en (Genesis 25:27-34) era un hombre que le gustaba la caza, le gustaba ir de cacería y comía de lo que cazaba, por lo que esto le agradaba mucho al papá, quien estaba muy identificado con el. Pero un dia bajando del campo se sentia presionado, casado y hasta sin fuerzas, fue ahi que Jacob aprobecho su debilidad para tentarlo con una oferta y quedarse con su herencia. Asi pasa con satanas, aprobecha tu debilidad en el momento de cansancio y presion por las circuntancias, para traer ofertas tentandoras y quitarnos nuestra herencia. Esaù al recibir la oferta, ya estaba convencido por satanas y dijo de que me vale mi primogenitura ahora, si voy a morir, de que me sirve. El estaba viendo su presente, su futuro imposible, el solo queria dejar de sentir lo que sentia y se enfoco en lo que veía en el insatante. Por lo que Esaú entrega todos los beneficios permanentes de su primogenitura a cambio de un placer inmediato. Lo triste es que no solamente seria un placer inmediato, sino temporal, porque se iba a terminar. En ese momento Esaù iba a comer tal vez lo más delicioso que podía existir, pero después de unas horas, pasaria y ya no quedaria nada del plato. Mas sin embargo la primogenitura era algo que iba a perdurar para siempre, que le daria muchos beneficios y ya no podria recuperarla. Asi como Esaú muchos actúan de una manera impulsiva, y todo por satisfacer sus deseos inmediatos, sin detenerse a considerar cuáles seran las consecuencias. Muchos estan actuando de la misma forma que Esaù, enfocados en las circunstancias del momento actúan sin detenerse a pensar, discernir o analizar la situacion. Es lamentable decir que por las circuntancias caemos en la misma trampa en la que cayó Esaú y por un momento, perdemos todo. Tal vez al principio nos podemos sentir muy satisfechos porque hicimos lo que quisimos, pero después de un rato o de un tiempo nos damos cuenta que nos equivocamos, y cometimos un error. Lo triste es cuando queremos regresar el tiempo, no podemos hacer nada, Esaù por su error perdio no tan solo su primogenitura sino que al renunciar a ella, perdio la Bendicion de su padre. Al cometer la primera falta, su hermano Jacob tomo ventaja y hasta la Bendicion del padre le arrebato. Como Esaú cambiamos algo que es trascendente por algo intrascendente; algo importante por algo que no tiene valor, algo que solo nos beneficia al istante, por algo que nos beneficia permanentemente y es perdurable. Asi como Esaú muchos estan tomando decisiones equivocada, otros estan haciendo cosas que a Dios no le agrada y llegara el momento en que van a tener que sufrir las consecuencias. En ocasiones sentimos tanta presión ante lo que nos rodea, cansancio ante tanta pruebas, y agotamiento ante las circunstancias que solo actuamos fuera de la voluntad de Dios y lo ofendemos sin medir los actos. Ay que tener cuidado, las presiones nos llevan a hacer cosas que van en contra de la voluntad de Dios y nos roba la Bendicion. Nosotros perdemos la perspectiva de lo que Dios establece, cuando cedemos a la influencias de lo que esta a nuestro alrededor o nos ofrecen. Esaú venía cansado, sin fuerza y regresa con hambre, lo único que quería en ese momento era satisfacer el hambre. Las circunstancias lo llevan a decir: quiero de eso que tú preparaste, quiero de eso que tú ofreces. En cuántas ocasiones a nuestro alrededor existen situaciones en las cuales el enemigo pone tentaciones, ofertas y cosas para que nosotros las veamos y digamos: yo quiero de eso, yo necesito de eso. En eso momentos batallamos con nuestro espiritu y nuestra carne, nos cuestionamos: yo soy cristiano, esto lo prohíbe la palabra de Dios, esto esta mal, pero sedemos y consentimos lo que hacemos, cambiando la bendición y lo sagrado que tenemos por un plato de lentejas. Sabias que cualquier cosa que esté en contra de la voluntad de Dios, es un plato de lentejas, así de fácil, todo aquello que esta fuera de su palabra es profano. En Hebreos 12:16-17 Pablo dijo:, No sea que halle entre ustedes algún fornicario, o profano, como Esaú, que por una sola comida vendió su primogenitura. Porque ya sabéis que aun después, el deseando heredar la bendición, fue desechado, y no hubo oportunidad para el arrepentimiento, aunque la procuró con lágrimas.. Esaú despreció la bendicion espiritual y vino a ser un profano, que significa segun el diccionario: deshonran, violar o hacer uso indigno, mostrando poco respeto por algo sagrado. De acuerdo a Pablo que escribio los Hebreos, Esaú fue un profano, ¿por qué? porque vendió una comida por algo que era sagrado. El deshonró la primogenitura delante de su padre, violando lo que el habia establecido sin respetar su autoridad y voluntad. En la Biblia pablo nos hace una advertencia muy clara, dice: cuidado no sea que alguien deje de alcanzar la bendición de Dios por una actitud o decision fuera de lugar, que por fornicario o por profano, sea desechado y deje de alcanzar la gracia de Dios. Asi que cuidado, no deshonres lo que Dios ha puesto en ti, no le faltes al respeto, no profanes su lugar sagrado. No vaya a pasarte como a Esaù que por un momento de placer perdio lo mas valioso que tenia y despues procuro con lagrimas recuperarlo y no pudo. El apóstol Pablo dijo: que cuidaramos nuestra salvación con temor y temblor, y tambien dijo que resistieramos al diablo y huiria de nosotros. Como le resistimo con las armaduras bien puestas, sin que nos falte alguna y en oracion, palabra y ayuno. Velemos por llegar a la meta, tenemos que velar por la salvación y no perderla. No pierdas tu bendicion por un plato de lentejas, ten cuidado, huye del pecado, no la pierdas por algo efímero, por algo temporal. Dios los Bendiga!
Créditos a su Autora: Yadira Gonzalez Ramos